Candida Höfer en México

Puebla, Pue. a 17 de marzo de 2018
• Candida Höfer es una fotógrafa alemana que concibe la fotografía como un medio para retratar espacios interiores de edificios icónicos
• La fotógrafa lleva a cabo una metodología estricta para retratar y tiene un especial interés por fotografiar lugares públicos o privados en ausencia total de la presencia humana
• Esta muestra está integrada por la serie fotográfica titulada En México, realizada durante una estancia de Candida Höfer en nuestro país en octubre de 2015
• Candida Höfer y su equipo recorrieron durante veinte días Jalisco, Guanajuato, Estado de México, Puebla y Oaxaca, así como Ciudad de México
• Esta exposición es organizada en el marco del Año Dual Alemania-México, y producida por ASMA, S.C. en colaboración con OMR y el Museo Amparo
• La exposición abrirá al público este sábado 17 de marzo en las Galerías del Museo Amparo y permanecerá hasta el lunes 9 de julio de 2018El Museo Amparo se complace en presentar la exposición Cándida Höfer en México, que fue inaugurada con un diálogo entre Patricia Ortiz Monasterio, curadora de la exposición y Laurence Le Bouhellec, historiadora del arte.

Candida Höfer (Eberswalde, Alemania, 1944) estudió fotografía en la afamada Academia de Arte de Düsseldorf bajo la tutela de Bernd y Hilla Becher, quienes crearon la primera cátedra de fotografía artística en 1976, y de la cual surgió la llamada Escuela de Düsseldorf, orientada hacia una “nueva objetividad”, una búsqueda de la realidad sin interpretaciones personales que se distingue por aplicar una perspectiva tipológica y serial a la representación de motivos cotidianos, aparentemente banales o casuales. En 1982 Höfer egresó de la cátedra de los Becher y en esa época era la única mujer fotógrafa en un mundo de hombres.
Inicialmente realizó algunas series fotográficas en formatos pequeños como Los turcos en Alemania, en la que refleja la vida de los trabajadores inmigrantes turcos bajo una línea documental, así como también fotografió zoológicos y museos etnográficos, siguiendo los lineamientos conceptuales de los Becher.
A partir de la década de los noventa, Candida Höfer comenzó a concebir la fotografía como un medio para retratar espacios interiores de edificios icónicos aplicando en sus tomas una metodología estricta: búsqueda de simetría; frontalidad de toma; punto de fuga; utilización de la luz existente en los espacios, sea natural o artificial, sin usar flashes o lámparas; al tiempo en que empezó a predominar su interés por fotografiar lugares públicos o privados (teatros, palacios, bibliotecas, museos, salas de espera, auditorios, iglesias) en ausencia total de la presencia humana. Paradójicamente, el vacío de sus imágenes funciona como un retrato psicológico del intercambio social que se da en esos lugares. Implícito en esos espacios, lo humano se percibe sólo a través de sus huellas: en la configuración de las formas, en la elección de los colores, en la colocación de los objetos.
Es como si quisiera captar la huella que las personas dejan en los lugares que habitan, tratar de descubrir el aura de los mismos, la historia íntima de los edificios a través del paso del tiempo y las historias que cuentan aun cuando han quedado vacíos.
Esta muestra está integrada por la serie fotográfica titulada En México, realizada durante una estancia de Candida Höfer en nuestro país en octubre de 2015. De una selección preliminar de miles de edificios importantes que conforman el patrimonio arquitectónico de México, la artista retrató sólo quince edificios icónicos en distintos lugares de la República Mexicana, tomando en consideración el tiempo disponible y las distancias geográficas para llegar a ellos.Candida Höfer y su equipo recorrieron durante veinte días Jalisco, Guanajuato, Estado de México, Puebla y Oaxaca, así como Ciudad de México.
El resultado de esta investigación es una colección de fotografías en gran formato que conviven con proyecciones fotográficas e imágenes más pequeñas tomadas con una cámara que la artista trae siempre consigo revelando gestos únicos: una vela en el piso de la Catedral, el borde colorido del umbral de una puerta, las vetas del mármol de Bellas Artes, un rayón en la pared. Al intercambiar fotografías de espacios a gran escala con fotografías de detalles, Höfer produce un emotivo diálogo entre la majestuosidad de la arquitectura monumental y la humildad del pequeño recoveco, permitiendo ver el lado más personal de su mirada.A través de estos “retratos espaciales” como Candida Höfer los denomina, en los que confluyen planos y colores, así como relaciones de orden y desorden, el espectador puede adentrarse en las obras, descubrir estos lugares tal como son y observar, a través de una mirada contemporánea, el valor histórico y estético de nuestro patrimonio.La exposición permanecerá abierta al público en las Galerías del Museo hasta el lunes 9 de julio de 2018.