A todos los Sacerdotes y fieles de la Arquidiócesis de Puebla, Salud y gracia en el Señor: Gobierno Erleidstico
En estos días sagrados de la Navidad, hemos visto con pena como el número de los hermanos contagiados por el virus SARS-CoV-2 ha crecido exponencialmente, lo mismo que el número de fallecidos, lo que ha llevado a nuestras Autoridades Estatales a tomar medidas que contribuyan a disminuir el contagio y prevenir un colapso en nuestro sistema de salud.
Nuestra fe, sostenida en las enseñanzas de nuestro Señor Jesucristo y en la tradición apostólica, nos impulsa a valorar y preservar el don sagrado de la vida, así como la integridad física y espiritual de todas las personas.
Es por eso que, como un acto de solidaridad con los esfuerzos que nuestras autoridades realizan, por contener el avance de este virus y como un compromiso de la propia Iglesia, que se suma al sacrificio de toda la sociedad poblana, por las presentes letras
DECRETO
Que a partir del 29 de diciembre de 2020 y hasta el lunes 11 de enero de 2021, se suspenden todas las celebraciones litúrgicas y otras actividades pastorales con presencia de fieles, por lo que los templos, capillas y demás instalaciones deberán permanecer cerrados, a fin de evitar la movilidad de fieles y contribuir a la disminución de la transmisión del virus.
Exhorto a todos los Sacerdotes, fiscales, mayordomos, encargados de capillas y fieles, a que asumamos con responsabilidad estas disposiciones, sabiendo de lo doloroso de la situación, pero conscientes de la necesidad que tenemos de sumar esfuerzos. Evitemos cualquier acción contraria que pueda dañar la salud de los fieles y de los sacerdotes.
Para las celebraciones tan importantes de estos días: 31 de diciembre, Acción de gracias por el fin de año; 1 de enero, Solemnidad de Santa María Madre de Dios y día de encomendarnos a la Divina Providencia; y 6 de enero, Fiesta de la Epifanía del Señor, les pido a todos que sigamos la transmisión de las diferentes celebraciones a través de las redes sociales y medios de comunicación, ya sea de la Arquidiócesis de Puebla o de sus propias parroquias.
Estimados hermanos, no estamos solos, Jesucristo es el Emmanuel, el Dios-con-nosotros, que Él nos sostenga con su gracia y nos de la paz en estos momentos tan difíciles. Los encomiendo a la intercesión de nuestra Madre del Cielo y de corazón les envío mi bendición pastoral.
Este decreto entra en vigor a partir de la fecha de su expedición. Dado en la Ciudad de Puebla de los Ángeles, a los veintinueve días del mes de diciembre del año dos mil veinte.
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